El Gran Showman
- alexzv955
- 31 dic 2017
- 4 Min. de lectura
Debo hablar del tráiler, porque desde el primer instante que lo vi, la férrea y potente aparición del magnífico Hugh Michael Jackman, que ha colgado las garras de “adamantium”, y ha empezado a tomar decisiones sobre su carrera, que le harán estar aún más alto, de lo que ya se encontraba, me sobrecogió mi corazoncito, y me hizo emanar cientos de emociones que en muy, muy, muy pocos trailes que he visto este año, y en lo que llevo viviendo en este bello planeta, mis ojos han podido presenciar. Me da mucha rabia, haber tenido que esperar un año entero (ya que estamos solo a un dia de terminar 2017), para poder disfrutar de tal obra maestra del cine, dirigida con excelencia, interpretada con exquisitez, y admirada por todos los cinéfilos, que amamos deleitarnos por unos breves y fugaces momentos, con algo que nos haga sentir vivos, y no edulcorados.

Crear un espectáculo que guste a todo el mundo, que no ofenda a nadie, y que nadie, en absoluto, saque algún comentario negativo de lo que acaba de ver, es una misión tan imposible, que ni el mismísimo Tom Cruise podría completarla. Y no hablo de estos modernos y falsos tiempos. No, hablo de las memorias del espectáculo en todo su esplendor, a lo largo de su larga historia, que aún hoy, podemos entretenernos todos juntos, contemplando como el teatro nos maravilla, y el circo nos embelesa con su magia exótica y atrayente. Pero yo ya he dejado de sufrir por los demás, aunque mis palabras solo sean ladridos de un pobre y abandonado perro, que deambulo por las calles de la codicia y la fama infundada, en busca de un gran hueso que roer, y así disfrutar y soñar, de aquellos tiempos, en los que el cine (si, el hueso era una metáfora del cine), era todo maravillas y sorpresas.
No como ahora, que dado el bajo interés que tienen la mayoría de las productoras cinematográficas, en muy pocas ocasiones, podrás hallar, ese ansiado film, que te complazca por completo, y te realice como persona. No esperes más, buscador de leyendas, hoy, te traigo, solo para ti, y para nadie más, lo que andabas buscando. Respira, expira, y sigue leyendo. Y prepara al menos diez euros para ir a ver la peli, que esta hay que ir a verla en una sala VIP.
No sabría por dónde empezar, ya que no tengo palabras para describir lo que hoy he visto con esplendor, y he escuchado con furor. Pero en cambio, me sobran tantos sentimientos, que no creo que quepan todos juntos dentro de mi corazón, que yace exhausto en el suelo de mi pecho, por haber disfrutado como nunca antes lo había hecho, de, sin duda alguna, el mejor musical que mis oídos han escuchado en todo lo que llevan oyendo, y, la película perfecta, para cerrar un año de 10, para el cine, y para todos aquellos, que hacen posible, que los espectadores, descubran que su felicidad, jamás ha tenido límites.
Puede que me esté volviendo un poco sentimental, pero entender lo que quiero explicar. Yo me esperaba una película bastante buena, que no me iba a decepcionar, ni a mí, ni a nadie. Pero en absoluto me podía imaginar, que mis emociones se iban a topar, con tal peliculón, que te hace vibrar, soñar y hacer alzar el bello de tus brazos, para que ellos también puedan tocar, esa magia que flota en el aire, desde el primer minuto que comienza la película, hasta el último segundo, que por desgracia, termina. Y ese es su único fallo, que el espectáculo, se acaba. Y con él ,una danza de canciones, que aunque pasen días, semanas y años, aun seguirán resonando en tu cabeza, mientras las tarareas sin darte cuenta, y te embriagan con ese encantador e indescriptible aroma de alegría, poderío, y soberbia.
Ni una sola pierde el ritmo. Ni una sola te desagrada. Ni una sola se repite o te suena rebuscada y forzada. Ni una sola canción, logra que te duermas o bosteces, ya que eso se lo dejamos a los pesados dramas, y aunque en este poderoso e increíble film, veamos ese género, quedara desbancado y eclipsado, por unas lágrimas de satisfacción y dicha, que no podrás contener. Te lo vuelvo a repetir por si aún no te ha quedado claro: No esperes más, compra la entrada, y disfruta del mayor film del año, ya que es imposible que salgas decepcionado de la sala. Eso sí que es imposible.
Podría decir que Michael Gracey se ha convertido en mi director de cine por excelencia, pero metería, aunque mientras escribo estas palabras, no puedo disponer de otro sentimiento, que me haga pensar lo contrario. Michael, lo que has conseguido, no muchos directores pueden alardear de haberlo hecho. Y los que lo han conseguido, los puedo contar con los dedos de las manos. Has conseguido adentrarte en lo más hondo del corazón de las personas, quitarles las telarañas, y darles lo que llevan buscando toda su vida: Algo que les haga sonreír, gozar, y repetir plato.
Te doy las gracias, por lo que nos has entregado con amor y dicha. Te doy las gracias, por conseguir que por primera vez en mucho tiempo, la trama no sea la protagonista, sino el personaje secundario, que queda en segunda posición, mientras la música, el baile y la sintonía, van danzando a coro, por los odios de los espectadores, que quedan embobados, ansiosos, e hipnotizados por tal espectacular espectáculo. Te doy las gracias, y te las seguiré dando el resto de mi vida, a ti, y al reparto estelar e insuperable que han participado en tal obra maestra, por conseguir crear en mí, un sentimiento de bienestar, que creía olvidado.
Hugh Jackman es el indiscutible rey y señor de esta grandiosa película. Reina con escándalo y un ritmo que hace imposible que no te mueves al son de unos pasos y una voz, que electrifica tu cuerpo, estremece tu rostro, y da sentido al porque estás ahí sentado, contemplando, una actuación, de uno de los mejores actores de todos los tiempos. Puede que suene exagerado, pero no pensareis igual, cuando lo veíais actuar. Mirar la película basada en el musical Los Miserables, y entenderéis lo que os estoy diciendo.
Insuperable, increíble, indescriptible, intachable, soberbia, extraordinaria, y una de esas películas, que se convierten en una de las experiencias más hermosas, atrayentes, y palpitantes, en la que tus sentidos se han visto sumergidos, en un festival en el que la belleza, la actuación, y la música, se dan la mano, para sacar algo extraordinario e imposible de igualar.
Commentaires