Posesion Infernal (remake)

Horripilante, monstruosa y visceral, con fuentes de sangre caliente saliendo a borbotones de la pantalla, que inunda la sala, dejándote flotando en medio de un océano rojo de brazos amputados y cadáveres en descomposición. Una película tan espantosa en el mejor sentido de la palabra, que se ha puesto en primera línea de batalla, por conseguir el liderato de ser la película más brutal y sangrienta que mis ojos han podido presenciar. Tan atroz y tantas nauseas me ha provocado, que deseo verla otra vez, solamente para seguir torturando mi morbosa mente. Me he visto su anciana y antecesora película y para ser un remake, tengo que admitir que estoy muy sorprendido. Hago una reverencia a este espectacular film de culto, que ha logrado aterrorizar y provocar vómitos de angustia y asco, a las insensatas personas que se han atrevido a vislumbrar esta caja de pandora, llena de pus, vísceras y huesos rotos. La actuación de cada uno de los personajes, no es para menospreciar, ya que hay que tener mucho estomago para interpretar un papel tan angustioso, que me ha recordado a las escenas de las pelis ochenteras como: Viernes 13 y Halloween. El ambiente nublado, grisáceo y encerrado, hace que te quedes atrapado en una trama, que nunca te deja descansar, gracias a su ruidosa y penetrante banda sonora, que te congela la carne llena de barro y magullada, por la cortante y fulminante tensión que te lima los ojos, partiéndolos por la mitad, como dos pedazos de naranjas con moho. Estremecedora, impactante y violenta