Guardianes de la galaxia. Vol.2

El universo es inmenso, grandioso, y misterioso. El universo es el todo de todo, es el mar que nos hace nadar por lejanas mareas, es la oscuridad que profundiza nuestro ser, es los planteas que nos hacen replantearnos día si día también, si de verdad somos la única vida que existe en toda la galaxia. Al igual que en el planeta tierra, tenemos súper héroes, que nos protegen de los villanos y monstruos que intentan arrebatarnos nuestra libertad, y apoderarse de nuestro bello mundo, la galaxia, también necesita súper héroes, que les ayude a afrontar las batallas que aun quedan por venir, y que ponen en peligro millones de planetas, incluido el nuestro. Estos súper héroes, no necesitan súper poderes para combatir el mal que les acecha en cada nebulosa. Estos héroes variopintos y dispuestos a jugarse el pellejo por proteger la galaxia, lo único que tienen en común, es que luchan en el mismo bando, aunque algunos parezca que no lo hacen. Tenemos a un mapache que habla y lanza misiles por doquier, tenemos a un arbolito muy mono que la única palabra que pronuncia es “Yo soy groot”, que parece ser suficiente para que los demás lo entiendan. Después tenemos a la pareja de enamorados, que son un humano con una puntería certera, y una extraterrestre muy sensual, que con fuego en sus ojos, acaba con todo el que se

cruza en su camino. También tenemos al musculoso alienígeno, que con furia y una risa nada contenida, puede destruir todo a su paso.

Pues aquí los tenéis de nuevo, a los que se supone que nos van a proteger de amenazas cósmicas, pero ni tan siquiera saben protegerse ellos mismo, y encima crean un extraño y llamativo equipo de luchadores del bien, que se meten en cada “envolao”, “quepaque”. Yo creo que es la combinación perfecta para que se desarrolle una gran y extraordinaria secuela, que, espero, de muy buena fe, que no nos decepcione con ideas sacadas de la nada, sin ser revisadas con su debido detenimiento, y que luego, al salir del cine, pienses hacia tus adentros: Bueno, ha sido divertida. Parece que estoy hablando en pasado, pero en cambio, se perfectamente lo que me ha hecho sentir esta película, y lo que os hará sentir, lo que pasa es que hoy me he despertado nostálgico, y quería recrear una impaciencia agradable, para que vosotros, os llevéis una grata sorpresa; veis como soy buena gente.

Bueno, como he mencionado anteriormente, y que por lógica, algunos de los que estáis leyendo esto, ya deberíais saber que se trata de una segunda parte, de una gran y entusiasta primera entrega, os tengo que decir, de que Marvel, la empresa cinematográfica y creadora de cientos de universos y de personajes con sus distintos y llamativos poderes, ha pegado tal salto de la nada en los últimos años, que te quedas con la boca abierta, pensando, en como llego a esa nada. No voy a entrar en detalles, explicando como Marvel, solo era conocida por sus increíbles comics, así que me enfocare en la película, que aquí nos trae.

Pero madre mía chicos y chicas, madre mía. Madre mía pronunciares por todo lo alto, al descubrir que otra vez, y aún más fuerte que la anterior, os agarran de la cintura con fuerza y presión, os zarandean por toda la sala como una hoja que está a punto de soltarse de la rama, y os golpean una y otra vez la cabeza, contra un suelo de lo más cómodo y satisfactorio. Puede que exagere un poco con estas insinuaciones, pero no me estoy refiriendo en absoluto, a que cuando estéis sentados en la butaca, os sumerjáis en una trepidante atracción cinco dimensiones. Pero tampoco lo estoy negando.

El cine, me está sorprendiendo cada día que piso su territorio, ya que primero fue mi sorprendente e increíble satisfacción, al ver una tremenda y excitante segunda parte del elegante Jhon Wick, y ahora, sin avisarme de nada, quiebran mis defensas, destruyen mis instintos, y yo, confiando de que no debía confiarme, en que esta película iba a satisfacer mis gustos más exquisitos y exigentes, me dan una buen bofetada en la cara, y vuelven a hacer brillar mis sentidos, y acabar con mis incredulidades. No, no estoy bromeando en absoluto. Esta película en cuestión, es la mejor, que podéis ver en cartelera, ahora mismo. Lo sé, si, si, si, está La Bella y la Bestia, Jhon Wick, Ghost in the cell, y otras muchas más. Pero lo que este film contiene en su interior, esas tres películas que he mencionado, lo tienen, pero en pequeños y dosificados fragmentos, para engrandecerlas a ellas, pero no al público en general. Primero pensareis que estáis ante una película familiae, y al hacerlo, cometeréis un error al juzgarla antes de acabar de visualizarla. Luego, después de un lenguaje mordaz que ya deja claro, que no la llevarías a ver con tus hijos más esponjosos y propensos a absorber cada información que pasa ante sus ojos, te acomodas en el asiento, y te dejas llevar, hacia un mundo, una galaxia, un universo repleto de fascinantes y divertidísimas aventuras, en las que no podrás evitar sonreír, reír, aplaudir, y finalmente llorar, por estar en presencia, de una película, que ha calado en lo más hondo de tu corazón, utilizando un coctel explosivo, que si no revienta tu tórax, lo hace florecer con majestuosidad.

El director James Gunn, que no se si ya abre hecho la metáfora de la semejanza de su apellido con su estilo de llevar a cabo sus dos últimas películas, y que de ser así, ahora mismo lo hare, es un director, que sabe cómo hacer implosionar al público, sin utilizar los clásicos y reciclados clichés, que sí, de vez en cuando no está mal utilizar alguno que otro para demostrar la superioridad de un país, adversario o ser ancestral, pero al fin y al cabo, lo clásico, por desgracia, y por suerte, acaba cansando al público deseoso de ver cosas nuevas en las grandes pantallas. James Gunn, lleva lo de tirotear en su sangre, ya que si le quitáramos un “n” a su primer apellido, nos quedaríamos con “Gun”, que en ingles significa “arma”. Sé que es una metáfora un poco/mucho baja en risas, pero lo tenía que decir, ya que tengo toda la razón. Tengo toda la razón, porque si vierais lo bien que me lo he pasado visualizando cada escena de esta tronchante y emocionante película, pensarías que los sentimientos y hechos que han conseguido hacerme partirme de risa, llorar de risa, y mantenerme en el asiento como una estalagmita que cuelga del techo, sin moverse, inmóvil, a la espera de que algo grande pase, otra vez, ante sus narices, pensaríais que me estoy refiriendo a los acontecimientos vividos por un niño risueño y alegre, que se lo ha pasado de diez y “chupiguachi”.

Lo magnifico de esta película, aparte de empatar (por no menospreciar a la primera parte, que tanto nos encantó a todos), es que está hecha para emocionar, para entretener, para impactar en el ansioso espectador, que espera con muchísimas ganas, agarrase con fuerza su propio cuerpo, cruzarse de brazos, apretar con solidez sus puños, y abrir bien los ojos, porque no sabe en absoluto, lo que va a ocurrir, ni cómo va a hacerle reaccionar. Todo esto, si se junta con una insuperable y marchosa banda sonara, que hace que bailen todos los capilares de tu piel, y que la pierna inquita contagie ese ritmo a la adormilada, crea verdaderas películas, que quedaran expuestas como obras de arte, en tu conciencia, y cuando de mayor te pregunten, cuáles han sido los mejores films que has visto, podrás decir, que este está entre los mejores.

Sentirás en tus carnes los escalofríos que te producen los cientos de millones de años luz que convergen todos en una única oscuridad. Sentirás las chispas que te queman los pelos de la piel, con cada explosión provocada por cada disparo bien ejecutado, hacia unos enemigos imposibles de ganar, pero que van perdiendo. Sentirás el arropo de una familia de los más desestructurada, pero que ante todo peligro y pronostico, consiguen siempre acudir en tu ayuda. Sentirás como estas batallas que parecen infinitas y que a lo mejor pueden llegar a cansarte, no cumplen tus pesimistas expectativas, ya que cada milímetro de cada escena, lo vas a disfrutar como si de verdad estuvieras luchando contra un enemigo de los más poderosos.

Que decir de este guasón y cachondo grupo de actores, que compaginan tan bien el uno con el otro. Primero tenemos a Chris Pratt, que vuelve a enseñarnos quien es el cowboy espacial. Luego a la mística y sensual Zoe Saldaña, al voluptuoso y corpulento Dave Bautista, al gamberro e desesperante Bradley Cooper, al insaciable y monopolista Michael Rooker, al galán y todopoderoso Kurt Russell, a la ingenua y afable Pom Klementieff, y por último, a la venganza personificada, Karen Gillan .

Fabulosa, tronchante, y una de esas películas que agradeces haber ido a ver al cine, por hacértelo pasar tan genial, que sales del cine, en dirección a la taquilla, para volver a verla.