El alucinante mundo de Norman

Tengo que admitir que al ver el tráiler me parecía que a simple vista era solo la típica película plastininenska que ofrecía otro film para niños. Pero no podía estar más equivocado al prejuzgar una película interesante, pragmática y que logra arrancarle a la muerte una sonrisa y ver el lado divertido del terror, al puro estilo de Tim Burton.

Es la historia de un niño antisocial, obsesionado con los zombis y que ha aprendido a aceptar y a convivir con su sexto sentido, que le permite ver fantasmas del pasado, hablar con ellos e incluso interactuar. Es bella a su manera, divertida y adulta, que enseña a adolescentes y a adultos, que ver muertos (como nos enseñó la película El sexto sentido) no es tan malo como parece, extraño y fantasmagórico sí, pero cuando ves todas la posibilidades que se te presentan como: Poder volver a ver a tu querido amigo canino, poder volver a disfrutar de la cálida nana de tu abuelita y no tener miedo de que el último suspiro sea el final de alguien. Entiendes que es un don, y no una maldición Con chistes y experiencias que los niños no podrían comprender, es una película que no pondría a un niño de 7 años, pero si a uno de 8, ¿el por qué? Supongo que es la edad perfecta para traumatizar a un niño y guiarle en el majestuoso y oscuro camino de los films de terror sangriento, espíritus malvados y ejecuciones dolorosas. Creo, que al igual que la novia cadáver y pesadilla antes de navidad, sería un largometraje que los padres fans de lo paranormal y los asesinos en serie, deberían poner a sus hijos, para colocar piedra a piedra el camino de los seguidores del aterrador mundo del pavor.

Bonita, espeluznante y aguda